La revista de la Sociedad Española
de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial.
Vol 63 | Nº31 de septiembre de 2025

El desgaste interproximal en el tratamiento con alineadores, consecuencias dentarias y periodontales: Revisión sistemática de la literatura.

Recibido
30 de mayo de 2025
Aceptado
30 de mayo de 2025
  • 1. Estudiante Grado. Universidad de Sevilla.

  • 2. Prof. Sustituto interino. Universidad de Sevilla.

  • 3. Prof. Sustituto interino. Universidad de Sevilla.

  • 4. Prof. Ayudante Doctor. Universidad de Sevilla.

  • 5. Prof. Titular. Universidad de Sevilla.

Correspondencia:

| Email: alvdomrei@us.es

Resumen

INTRODUCCIÓN: El desgaste interproximal (IPR) es una técnica ortodóncica utilizada para ganar espacio sin recurrir a extracciones, especialmente en casos de apiñamiento leve. Su finalidad es la alineación dental y la estética. Actualmente, su uso ha aumentado con el auge de los alineadores transparentes, sin embargo, persisten dudas sobre sus posibles consecuencias en la salud dental.

OBJETIVO: Analizar las consecuencias dentales y periodontales de la realización de desgaste interproximal (IPR) en tratamientos con alineadores transparentes.

MATERIAL Y MÉTODO: Se realiza una búsqueda electrónica en las bases de datos PubMed, Cochrane, Embase, Scopus y Web Of Science. Se evaluó el nivel de evidencia mediante la escala OCEBM, y la calidad de los mismos mediante la escala ROBINS-I.

RESULTADOS: Veinticuatro artículos (catorce experimentales in vitro, cuatro experimentales in vivo, tres estudios de cohortes, un estudio clínico longitudinal observacional de cohortes y un estudio transversal) fueron incluidos en nuestra revisión sistemática. El riesgo de sesgo fue variable, cuatro estudios presentaron riesgo grave, dieciocho un riesgo moderado y uno un riesgo leve.

CONCLUSIONES: El IPR es una técnica segura y eficaz para ganar espacio en tratamientos con alineadores, siempre que se realice con protocolos estandarizados que incluyan un pulido adecuado. Cuando se realiza de forma conveniente, no se asocia con un mayor riesgo de caries ni daño periodontal.

PALABRAS CLAVE: Desgaste Interproximal, IPR, efectos dentarios, efectos periodontales, alineadores.

Abstract

INTRODUCTION: Interproximal reduction (IPR) is an orthodontic technique used to gain space without resorting to extractions, especially in cases of mild crowding. Its main goal is dental alignment and improved aesthetics. Currently, its use has increased with the rise of clear aligners; nevertheless, concerns remain regarding its potential impact on dental health.

OBJETIVE: To analyse the dental and periodontal consequences of performing interproximal enamel reduction (IPR) in treatments with clear aligners.

MATERIAL Y MÉTODO: An electronic search was conducted in the PubMed, Cochrane, Embase, Scopus, and Web Of Science databases. The level of evidence was evaluated using the OCEBM scale, and the quality of the studies was assessed using the ROBINS-I scale.

RESULTADOS: Twenty-four articles (fourteen in vitro experimental, four in vivo experimental, three cohort studies, one longitudinal observational cohort clinical study, one cross-sectional study, and one observational study) were included in our systematic review. The risk of bias was variable, with four studies showing a high risk, eighteen a moderate risk and one a low risk.

CONCLUSIONES: IPR is a safe and effective technique for gaining space in treatments with aligners, as long as it is performed with standardized protocols that include proper polishing. When done appropriately, it is not associated with a higher risk of caries or periodontal damage.

KEY WORDS: Interproximal reduction, IPR, dental effects, periodontal effects, aligners.

  • Revisión bibliográfica
Introducción

En 1944, Ballard propuso reducir el tamaño mesiodistal de los dientes para mejorar la alineación en casos de apiñamiento leve en la zona antero-inferior(1). En 1954, Begg introdujo el término “stripping”, basándose en que imitaba el desgaste natural observado en poblaciones primitivas(2). Poco después, Hudson describió el uso de tiras metálicas seguido de pulido y flúor(3). En 1958, Bolton destacó la importancia de una proporción adecuada entre dientes superiores e inferiores, lo que impulsó el uso del desgaste interproximal para corregir discrepancias sin extracciones(4). En 1972, Peck y Peck demostraron que los incisivos inferiores alineados presentan menor anchura mesiodistal y mayor dimensión faciolingual que los apiñados, lo que los hace candidatos para IPR(5). En 1980, Boese advirtió que el IPR es un procedimiento irreversible con riesgos, por lo que debe aplicarse con precaución(6). Ese mismo año, Tuverson propuso corregir discrepancias interoclusales reduciendo la corona mesiodistal o mediante extracción(7). En 1985 y 1987, Sheridan introdujo el Air Rotor Stripping (ARS), una técnica con fresas rotatorias que consolidó el IPR como alternativa a la extracción(8)(9). En 2004, Zachrisson destacó su valor estético para eliminar triángulos negros(10).

El ortodoncista dispone de una amplia gama de recursos terapéuticos para la corrección del apiñamiento dental, entre los cuales destacan: las extracciones dentarias, la expansión de arcadas, la distalización, la proinclinación de dientes anteriores y el IPR(13). Las principales indicaciones para realizar desgaste interproximal son: casos de apiñamiento leve a moderado (4–8 mm)(12), presencia de discrepancia de Bolton(15)(16), corrección de la morfología dental(17), normalización de los contornos gingivales(17), eliminación de triángulos negros antiestéticos(17) y ajuste de las relaciones incisal, canina y molar para tratar maloclusiones(18).

Es crucial conocer que el esmalte dental tiene un grosor promedio que depende no sólo del diente, sino además de la raza del paciente(22). Además, el esmalte distal tiene un grosor 0,1 mm mayor al mesial(23). Para no causar daños dentales o periodontales, es generalmente aceptado realizar un desgaste interproximal de hasta un 50% del grosor del esmalte(9)(22). Asimismo, según Tarnow, mantener como máximo una distancia de entre 4-4,5 mm desde el punto interproximal a la cresta alveolar evitaría la aparición de triángulos negros(25).

Otros artículos similares: